Cómo Calibrar un Termómetro en una Unidad de Temperatura Controlada

La calibración es el proceso de verificar si un termómetro proporciona lecturas de temperatura correctas. Esto se hace comparando las lecturas del termómetro con una temperatura estándar conocida. La calibración ayuda a garantizar que el termómetro sea lo más preciso posible, con solo una pequeña diferencia con la temperatura real. Sin calibración, incluso pequeños errores en las lecturas pueden generar datos erróneos o condiciones inseguras en procesos donde la temperatura es importante.

La precisión de lectura de los termómetros se deteriora con el tiempo y sus lecturas se “desvían” ligeramente, lo que da como resultado mediciones inexactas. Este deterioro se debe al uso y desgaste habituales, pero también puede ser el resultado de otros problemas ambientales. La calibración periódica de dispositivos de medición garantizará que las lecturas sean correctas.

La calibración periódica de termómetros es fundamental por varias razones:

• Precisión: los termómetros sin calibrar pueden dar lecturas falsas, lo que podría afectar a los resultados o procesos. En lugares como el almacenamiento de productos farmacéuticos o el trabajo de laboratorio, incluso un pequeño error de temperatura puede provocar la ruina de productos o resultados experimentales inexactos.
• Seguridad: en entornos donde se necesita un control exacto de la temperatura, como el almacenamiento en frío o la esterilización, el uso de un termómetro sin calibrar podría causar riesgos de seguridad. Si las temperaturas están fuera del rango seguro, el equipo puede fallar o los trabajadores podrían estar en peligro.
• Normativa: muchas industrias deben cumplir con estándares regulatorios que requieren lecturas de temperatura precisas y rastreables. La calibración regular garantiza que su termómetro cumpla con estos estándares y pueda pasar auditorías o inspecciones.

1. Conozca sus requisitos: es importante comprender qué puntos de temperatura necesita alcanzar. Según su industria o proceso, ciertas temperaturas son críticas para la seguridad y la calidad del producto.
2. Estabilice la unidad controlada: antes de la calibración, asegúrese de que la temperatura en la unidad controlada sea estable. Deje pasar suficiente tiempo para que el entorno alcance y mantenga una temperatura constante.
3. Inserte el termómetro: coloque el termómetro correctamente en la unidad, asegurándose de que la sonda o el sensor no estén demasiado cerca de fuentes de calor o frío dentro de la unidad, como ventiladores o serpentines de enfriamiento.
4. Compare con un termómetro de referencia calibrado: use un segundo termómetro ya calibrado para tomar una lectura del mismo espacio. Esto proporciona un punto de referencia con el que se puede medir el termómetro que se está calibrando.
5. Registre los resultados: mantenga un registro de las lecturas previas y posteriores a la calibración. Esto es importante tanto para el cumplimiento normativo como para futuras referencias.

En Ellab, nos dedicamos a satisfacer sus necesidades de calibración. Ya sea que necesite ayuda para configurar sus unidades con control de temperatura o requiera servicios de calibración en el sitio, nuestro equipo de expertos está listo para ayudarlo. Nuestro equipo de expertos puede calibrar su equipo, lo que garantiza que funcione de manera precisa y confiable.