Aplicaciones
Cuando se trabaja con muestras biológicas sensibles, el control lo es todo. En este caso, hablamos de controlar la temperatura para evitar que las muestras se deterioren. Ahora bien, la única manera de asegurarse de que se tiene el control, es validando y supervisando el almacenamiento en el que se guardan y el medio por el que se transportan.
Al realizar la validación térmica y la supervisión continua de estos procesos, dispondrá de los datos, informes y alertas necesarios para garantizar el cumplimiento. Si se hace bien, puede estar seguro de que sus muestras biológicas son seguras después de un tiempo prolongado de almacenamiento, y de que están intactas y son viables después de ser transportadas.
Para validar estos procesos, recomendamos el uso de data loggers inalámbricos, mientras que la monitorización continua debe establecerse mediante un sistema de monitorización ambiental.