Colocación óptima de sensores: Una guía basada en el riesgo para mapeo de temperatura

Antes de entrar en detalles, es fundamental subrayar la importancia de un enfoque basado en el riesgo para definir la ubicación de los sensores. Este método no consiste únicamente en seguir una serie de reglas; se trata de comprender el entorno único de su UAT y tomar decisiones informadas que den prioridad a la seguridad y la eficiencia. Al evaluar los riesgos, podemos determinar los puntos críticos que necesitan supervisión, garantizando un servicio de mapas de temperatura completo y eficaz.

Dependiendo del tamaño de su cámara, el número de sensores y su colocación variará. Aquí tienes una guía sencilla para empezar:

• Para cámaras de hasta 2 metros cúbicos: Ponga 10 sensores de temperatura, nueve dentro de la cámara para obtener un perfil de temperatura detallado y uno cerca de la sonda de monitorización/control para la correlación. Como se ilustra en la figura 1.
• Para cámaras de hasta 20 metros cúbicos: Este tamaño requiere 16 sensores. Quince deben cubrir el interior de la cámara, mientras que un sensor adicional cerca de la sonda de monitorización/control garantiza la coherencia de los datos. Siga la configuración que se muestra en la figura 2.
• Para instalaciones más grandes: El enfoque cambia ligeramente. En este caso, se trata de crear una cuadrícula, con sensores espaciados cada 5 a 10 metros, y ajustarla en función de los riesgos y características específicos de la instalación. Para espacios excepcionalmente grandes, considere la posibilidad de colocar sensores a una distancia de hasta 20 o 30 metros, basándose en una evaluación de riesgos que tenga en cuenta las características ambientales únicas y los productos almacenados. No olvide vigilar la temperatura ambiente, ya que los factores externos pueden influir significativamente en el ambiente interno.

Estas recomendaciones proceden de un análisis en profundidad de las directrices proporcionadas por fuentes acreditadas como la ISPE, la USP y la OMS. No son cifras sacadas de la nada, sino que están respaldadas por años de investigación y aplicación práctica.

🌐 ISPE (2021). Guía de buenas prácticas: Mapeo y monitorización de cámaras de temperatura controlada.
🌐 USP (2018). USP41-NF36 <1079>. Buenas Prácticas de Almacenamiento y Distribución de Productos Farmacéuticos.
🌐 Organización Mundial de la Salud (2015). Suplemento técnico 8 de la serie de informes técnicos de la OMS, Nº 961, 2011. Cartografía de temperatura de las zonas de almacenamiento.

Estas directrices deben servir como base y son adaptables a las necesidades de su instalación, teniendo en cuenta las características ambientales únicas para un mapeo preciso y la optimización de recursos, manteniendo la integridad y seguridad del producto.

Utilizar el número adecuado de registradores de datos, colocados estratégicamente, no es sólo una cuestión de cumplimiento, sino de garantizar la integridad y la seguridad de los productos almacenados en su UAT. Este enfoque ayuda a optimizar el uso de los recursos, mantener la calidad de los productos y, lo que es más importante, garantizar la seguridad de los pacientes en el caso de los productos farmacéuticos.

En Ellab, entendemos que cada instalación tiene sus desafíos y requisitos únicos. Si usted está buscando para refinar su sistema de monitorización continua o asegurar que su equipo es exactamente calibrado, nuestro equipo de expertos está aquí para guiarlo a través del proceso. Desde la evaluación inicial de riesgos hasta la implementación final, nos comprometemos a apoyar sus necesidades de mapeo de temperatura y cualificación de equipos.

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