La validación de equipos es el proceso documentado y sistemático de demostrar que el equipo, sistema o proceso opera de acuerdo con especificaciones predeterminadas.
El proceso de validación es importante porque promueve la seguridad, ayuda a mantener el cumplimiento normativo, y garantiza la coherencia en la calidad del producto, reduciendo riesgos y mejorando los procesos.
Las fases del proceso de validación
El proceso de validación incluye tres fases principales:
- Pre-validación: define si el equipo puede funcionar dentro de las especificaciones predeterminadas. La fase de pre-validación tiene dos etapas de validación, la Cualificación de Diseño (DQ) y la Cualificación de Instalación (IQ).
- Validación del proceso: durante esta fase se realizarán repetidas pruebas, imitando los procesos requeridos del equipo, para confirmar que cumple consistentemente con las condiciones decididas. En esta fase se encuentran las etapas de Cualificación Operacional (OQ) y Cualificación de Desempeño (PQ).
- Mantenimiento de validación: esta etapa también se conoce como posvalidación o revalidación. Si alguna de las fases anteriores no tiene los resultados deseados, se deben implementar algunos cambios para abordar por qué no estamos obteniendo los resultados que buscamos.
Hay tres etapas clave durante un proceso de validación que sigue el método del enfoque del ciclo de vida, garantizando una calidad constante del producto y el cumplimiento normativo:
- Diseño del proceso: durante esta etapa, el objetivo es comprender el proceso y definir los parámetros a seguir.
- Cualificación del proceso: este proceso implica pruebas rigurosas para confirmar que el proceso opera dentro de los parámetros.
- Verificación continua del proceso: esta parte del enfoque del ciclo de vida garantiza el seguimiento y control continuo del proceso durante la producción. Permite detectar y corregir posibles variaciones.
Este enfoque del ciclo de vida mejora la solidez y confiabilidad de los procesos de fabricación y se alinea con las expectativas regulatorias, lo que facilita inspecciones y auditorías más fluidas.
Manténgase en cumplimiento durante los procesos de validación de equipos
Cada proceso de validación de equipos debe cumplir con los requisitos de cumplimiento normativo. Garantizar que sus prácticas cumplan con las pautas reglamentarias de la industria de las ciencias biológicas hace que el proceso de validación de su equipo sea más seguro. minimizando el riesgo de pérdida de productos y mejorando la calidad de los productos, y asegura auditorías exitosas y sin estrés.
Seguir pautas como los «Principios y prácticas generales» de la FDA o las pautas de la EMA sobre validación de equipos garantizará que la validación de su equipo cumpla con los estándares regulatorios y al mismo tiempo minimizará los riesgos de cumplimiento.